Humanidad, creatividad, sensibilidad, calidad, empatía, formación continua… Todas características de las enfermeras y enfermeros que hoy 12 de mayo celebran su día. “El trabajo que se hace en Enfermería no debe ser entendido como una ejecución mecánica de técnicas y procedimientos. Por el contrario, tiene que ser un cuidado humanizado e individualizado. Por eso, un enfermero o enfermera necesita imaginación creativa, espíritu sensible, cuidado de los detalles e inteligencia. Por otro lado, es imprescindible la capacidad de comunicarse efectivamente, que comprende la escucha activa y la empatía”, afirmó María Marta Palermo, coordinadora de Enfermería del servicio de Terapia Intermedia y Trasplante de Médula Ósea del Hospital Universitario Austral.
“Para que todo esto sea viable, pero también por supuesto para brindar un servicio de excelencia y calidad y asegurarnos de que siempre los pacientes tengan todo lo necesario, es fundamental la capacitación permanente. Por eso, dentro del Hospital Universitario Austral se desarrolla anualmente el Programa de Capacitación de Enfermería (PROCAP). Por otro lado, la mayor parte de los enfermeros se capacitan también fuera del Hospital: todos los que son enfermeros están haciendo la licenciatura y también hay licenciados que están realizando posgrados, maestrias y especializaciones. Finalmente, la gran mayoría asisten anualmente a congresos y jornadas de su área de interés”, agregó Palermo.
El 12 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Enfermería en honor al nacimiento de quien marcara un cambio de rumbo en esta profesión: Florence Nightingale, una mujer que supo vencer obstáculos y asumir riesgos.
“Ella decidió ser enfermera en un momento en que para todos ese era el lugar de mujeres de vida dudosa. Decidió cuidar y empezó haciéndolo nada menos que en una guerra en la cual quiso ser la protagonista de una mejor atención para los soldados. Hoy los escenarios pueden parecer diferentes, pero en el fondo son muy parecidos: somos los mismos humanos, están presentes la guerra, el hambre, la soledad, el dolor y la muerte. Por eso, en este escenario actual, tenemos la misma oportunidad de ser protagonistas que Florence. El objetivo principal de esta decisión tiene que ser el servicio a los demás con voluntad para hacer, y conocimiento e inteligencia para que la acción sea oportuna, concreta y de ayuda”, expuso por su parte Alejandra Parissotto, Directora de Enfermería del Hospital.
Dado que capacitarse y enfrentarse a los desafíos tiene que ver, entonces, con integrarse a un mundo cambiante en el cual las necesidades en el campo de la salud son otras, siguiendo la línea de Alejandra Parisotto, para Sara María Consigli, del equipo de Cuidados Paliativos, el futuro de la Enfermería está lleno de protagonismo.
“La expectativa de vida está creciendo: en 1900 era de 35 años, y para este siglo en los países desarrollados ya alcanzamos los 86 años. Si además de esto consideramos que la incidencia de enfermedades no transmisibles como el cáncer, las patologías cardiovasculares y la diabetes pasó del 27% en 2000 a un 43% que se espera para 2020, nos daremos cuenta que hay que empezar a erradicar el concepto de cuidado paliativo como si fuera un bien de lujo. De hecho, teniendo en cuenta también las cifras del cáncer que se cree llegará a 6 millones de nuevos casos para 2020, se calcula que el 50% de la población necesitará en algún momento de su vida de este tipo de cuidados”, completó.
Contactos:
*Lic. Alejandra Parissotto
*Lic. Sara María Consigli
*Lic. Palermo Maria Marta
Integrantes del equipo de Enfermería
Hospital Universitario Austral
aparisotto@cas.austral.edu.ar
SCONSIGL@cas.austral.edu.ar
MPALERMO@cas.austral.edu.ar