Dimos la bienvenida a 83 nuevos médicos, entre residentes y becarios, que a partir de septiembre comenzarán su formación en nuestro Hospital y la Facultad de Ciencias Biomédicas. Se entregaron, además, los diplomas a los 95 residentes y becarios que terminaron sus especializaciones y programas de perfeccionamiento.
La ceremonia inició con las palabras del Dr. Guillermo Mazzollini, decano de la Facultad de Ciencias Biomédicas, quien destacó que “el residente es el corazón y el motor de un hospital universitario. En estos años han sido protagonistas en la atención de los pacientes y sus familias, enfrentando desafíos y demostrando un compromiso que va más allá de la mera obligación profesional. Seguramente han dejado una huella en cada persona a la que han asistido, en cada equipo con el que han trabajado y en cada rincón de este Hospital. No solo han atendido a muchísimos pacientes, sino que seguramente han establecido fuertes lazos de amistad».
Además, la Dra. Estefanía Risau, egresada de la residencia básica en Anatomía Patológica, habló en nombre de sus compañeros: «Si tuviese que destacar una de las fortalezas que aprendí y que tiene el Hospital, elegiría sin dudar el trabajo en equipo. Un equipo que persigue el bien común, que estudia, que debate, que prioriza la comunicación y comprende que el aprendizaje es tarea de todos los días. Como dijo un gran jugador, el talento gana juegos, pero el trabajo en equipo gana campeonatos, y no tengo dudas de que este equipo siempre irá detrás de lo mejor para cada paciente».
Por su parte, el Bq. Pablo Brenzoni, jefe de Laboratorio, alentó a los profesionales diciendo: “El compromiso con la atención de los pacientes es el core de nuestra existencia. Cada uno de ustedes, incluso quizás sin dimensionarlo en el punto de partida, llega con la vocación de hacer realidad nuestro propósito: ‘Cuidar con sentido trascendente a cada persona’. Es una responsabilidad enorme, pero también un privilegio. La empatía, el respeto y el compromiso son valores esenciales para brindar una atención de calidad, comprometida con los más altos estándares internacionales, que debe honrar la confianza depositada en ustedes cuando se enfrenten a un paciente, a una muestra, ante un diagnóstico o un tratamiento”.
Finalmente, el Dr. Fernando Iudica, director médico de nuestro Hospital, concluyó la ceremonia con un inspirador mensaje: “’Soñad y os quedaréis cortos’, estamos realizando esos sueños. Estamos cumpliendo con el ideario: dar formación profesional y en valores que se los llevan para crecer en sus vidas personales. Han aprendido a trabajar en equipo, con sus compañeros y en cada servicio, de forma interdisciplinaria. Han desarrollado la empatía para atender a los pacientes y a las necesidades de sus compañeros. También han aprendido a ser resilientes, a volver a empezar después de alguna caída o sensación de querer dejar todo. Y, lo más difícil, han aprendido la humildad, para poder escuchar a sus maestros y aprender, adquiriendo así las competencias de cada especialidad”.
¡Felicitamos a los egresados por este enorme logro y le deseamos el mayor de los éxitos a los que comienzan esta nueva etapa!