“En el 2019 llegamos al PSSI buscando prepararnos para un parto sin intervención luego de una cesárea, pero sin saber muy bien con qué nos íbamos a encontrar. Y no fue solo información o recursos, no fue solo prepararnos para el parto.

Para nosotros el PSSI fue poder conectar con el proceso, sentirnos acompañados, sostenidos y contenidos, fue encontrar personas que nos miraron a los ojos y nos preguntaron cuáles eran nuestros deseos como familia. Fue poder confiar en nosotros y en nuestros bebés. Porque claro, luego de esa experiencia tan sagrada en nuestro segundo embarazo, cuando llegó el tercero no nos imaginamos que fuera en otro lugar, queríamos los abrazos cálidos, la mirada amorosa y las palabras justas de quienes ya serían para siempre parte de nuestra historia. Gracias doulas y parteras del PSSI por acompañar con tanta entrega y amor».

Guadalupe y Juan Ignacio, Manuel nació en 2019 e Iñaki nació en 2022.

“No alcanzan las palabras de agradecimiento para el Programa PSSI y todas sus integrantes. Una experiencia maravillosa y sanadora en todos los sentidos. Habiendo tenido un parto anterior intervenido, puedo dar fe de la magia que obran estas mujeres con su entrega, amor, acompañamiento e información. Tuve un parto en movimiento, rápido, consciente. La recuperación fue increíblemente rápida y mi bebé no mostró ningún signo de agotamiento o stress. Después del parto te siguen acompañando con la lactancia. Fue una experiencia maravillosa para llegar al mundo».

Soledad, su hija Mayte nació en 2023.

“Desde la búsqueda del segundo embarazo soñaba con transitar este espacio.
Tuvimos la maravillosa oportunidad de formar parte del Programa PSSI el pasado año, buscando una experiencia distinta a la de nuestra primera hija Martina que nació por cesárea. Y así fue, con subunidad Beta en mano, y con los miles de temores que rondaban mi mente (porque la búsqueda de Mica no fue nada fácil), ¡me puse en contacto!

Empezamos los encuentros los días miércoles en la semana 25, con algunos cuidados… y así los miércoles fueron pasando… volaron.

Compartimos conocimientos, experiencias, intercambios enriquecedores y varias despedidas de panza, y sin darnos cuenta llegamos a la semana 39 y ahí vivenciamos nuestra despedida, muy movilizadora, fuimos los cuatro: mi hija Martu de 6 años, mi pareja Esteban, Mica en la panza y yo, lloré tanto… Llegamos a las 40.2 semanas y ahí luego de pasar un día de la madre en familia a la madrugada llegaron las contracciones. ¡Las recibí feliz! Llamamos al equipo y ahí estuvieron al 100 % para mí, en cuerpo y alma. Con un trabajo de parto rápido y un parto hermoso llegó Mica, con sus casi 4,2 kg.

No hay palabras que puedan describir el sentimiento de haber vivido tal experiencia… No lo creo aún. Hoy Mica ya tiene un año, y sigo sin creerlo…

Y me dan tantas ganas de atravesar otra vez todo, porque con el recuerdo invaluable no basta».

Sabrina y Esteban, su hija Micaela nació en 2022.